Mi hija le mandaba fotos picantes a su noviecito
CARMELA (47, Ayacucho).- La situación por la que estoy pasando es terrible, doctora, pues crié a mi hija con muchos valores morales y principios que no sé dónde los dejó cuando llegó a Lima para estudiar y trabajar. Ocurre que Luzmila, mi hija mayor, viajó a la capital para forjarse un futuro. Yo siempre llego a verla y después me regreso a Ayacucho, para no descuidar a mis hijos menores. Cada vez que ella nos visita la observo a la misma de siempre, un poco más conversadora, pero igual de decente. Sin embargo, en la última visita que hice a Lima para hacerme unos exámenes médicos, entré sorpresivamente a su cuarto y la vi en ropa interior sentada frente a su computadora, haciendo unas poses pecaminosas que me dejaron espantada. Fue entonces que me di cuenta que tenía una cámara en la que se filmaba y le mandaba las imágenes por la computadora al novio que tiene y que ni siquiera conozco. Como no sé nada de estas máquinas, recién me enteré que se había comprado una “web cam” para hablar con el noviecito y que éste la vea prácticamente como vino al mundo. Mi hija ya tiene 20 años y le dije que de inmediato la regresaba a la provincia para controlarla, pero me salió con que ya es mayor de edad y no puedo obligarla a nada. Entonces le dije que ya no le pagaría los estudios ni el alquiler del minidepartamento donde vive con otra amiga, y me contestó que se pondría a trabajar. Ahora tengo miedo que mi hija se eche a perder y no termine la carrera si dejo de ayudarla, pero está entercada con el novio y no sé qué hacer.
CARMELA (47, Ayacucho).- La situación por la que estoy pasando es terrible, doctora, pues crié a mi hija con muchos valores morales y principios que no sé dónde los dejó cuando llegó a Lima para estudiar y trabajar. Ocurre que Luzmila, mi hija mayor, viajó a la capital para forjarse un futuro. Yo siempre llego a verla y después me regreso a Ayacucho, para no descuidar a mis hijos menores. Cada vez que ella nos visita la observo a la misma de siempre, un poco más conversadora, pero igual de decente. Sin embargo, en la última visita que hice a Lima para hacerme unos exámenes médicos, entré sorpresivamente a su cuarto y la vi en ropa interior sentada frente a su computadora, haciendo unas poses pecaminosas que me dejaron espantada. Fue entonces que me di cuenta que tenía una cámara en la que se filmaba y le mandaba las imágenes por la computadora al novio que tiene y que ni siquiera conozco. Como no sé nada de estas máquinas, recién me enteré que se había comprado una “web cam” para hablar con el noviecito y que éste la vea prácticamente como vino al mundo. Mi hija ya tiene 20 años y le dije que de inmediato la regresaba a la provincia para controlarla, pero me salió con que ya es mayor de edad y no puedo obligarla a nada. Entonces le dije que ya no le pagaría los estudios ni el alquiler del minidepartamento donde vive con otra amiga, y me contestó que se pondría a trabajar. Ahora tengo miedo que mi hija se eche a perder y no termine la carrera si dejo de ayudarla, pero está entercada con el novio y no sé qué hacer.
Consejo: Carmela, ay Carmela, la vaca no se acuerda cuando fue ternera (y de bengala). Deja que tu hijita aproveche los adelantos de la tecnología y la ciencia. Todo el mundo lo hace, ¿ o tú nunca has chateado en Camfrog o en Yahoo? Es un método seguro, no hay fornicación, no hay embarazo, ni sida, simplemente se hacen la pajita dándole de comer al ojo. Deberías probar y conocer nuevas personas, como el negro telescopio, el negro tristeza, y a trompita de elefante. Yo por ejemplo he hecho muy buenas migas con la pantera venezolana chavista, la guindón con carca y la gran sonrisa vertical. Lo que si, cómprale su Kolirio, sus gotitas para los ojitos y tu Carmela, dile que te preste la pc o la laptop, lo que sea que use y que te conecte, te aseguro tía que te vas a poner más cachonda que Lindsay Lohan y Paris Hilton con sus cosmopolitan encima. No seas anticuada mujer, igual te vas a ir al infierno por babosona, asi que mejor vete en cadillac y no en burro.
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