ESQUELETOS EN EL ARMARIO

¡Júrame!
por Hugh Player

Mañana nos tocará asistir a -quizás el útimo- un cambio de ministrosos de la Fat Catrasca Administration. Es harto sabido que la cabecita de Rafo Rey está más pedida que la Riquelme en paños menores y que con el se irán, también, el Cholo-Chino Chang, el Huaco Jocoso del Dr Teníanos Quesquén y otros saldos entre los que esperamos encontrar a Mechita A. (que parece tener, amén del gusto por las fritangas, alguna loca ambición política) y a tanto cenicero de moto que ha servido absolutamente de nada en los reuniones de los panzones del fajín.
Suplicamos al Altísimo para que al menos dejen el agua (que no se tiran por falta de baldes) y que el pirañeado erario público sobreviva a estas idas en las que se llevan -como en realización- de todo y a precio bobo.
No podemos precisar si este será el gabinete final del gordo porque cuando el obeso la pirra con efecto en algo notorio no hay nada mejor a la mano como solución y barajo que echarse a uno o varios de estos patéticos secretarios y distraer a la feligresía con esas juramentaciones pelotudas en donde nunca faltan esos pagados barristas gritando, Victor, Raúl, Victor Raúl, Victor Raúl.
A esas alturas del partido hasta el Cristo se quiere bajar de la cruz y pedir que lo justo es que juramenten ante Satanás y que lo dejen de lornear con el cuento del por Dios y por la Patria, cuando lo unico que les interesa es el vil money que les asegura la vida hasta los tátara-tátara nietos y el presente laboral a los tátara-tarados parientes cesantes que presentan su hoja de vida en papel bond A-4 exactamente media hora después del Si juro, ay qué rico.
Supongo, por la cara de bipolar con la que anda nuestro primer ciudadano, que hay hartos problemas con la repartija y una creciente preocupación porque al quererse tumbarse al Mudo vía Lulú se les ha pasado la manopla y la izquierda ha comenzado a subir en el hígado del podrido votante peruano que ya esta cansado de que le metan la yuca cada cinco años con promesas que nunca se cumplen, remates y concesiones del país y el favoritismo al tagarote local en este paraíso y reino de los peces gordos.
¿Quién reemplazará a Rey en el importante Ministerio de Defensa?
¿Otro empleado de Periquito y Mario, obvios gestores cementeros de la reconstrucción chilena?
¿Quién tendrá el encanto chichero y huachafo del mediocre de Velásquez Quesquén, monitor del monitor de los intereses dionisiácos becepe?
¿A quién querrá la Bella Holandesa de la minería para suplantar a la casi empleada doméstica de Mercedes, que los mantiene exonerados de impuestos a sus millonarias sobreganancias?
Igual Nidia, media achorada como es, seguirá ocupándose de los cargadores negros de los funerales, de las desatenciones de los albergues del Padre Martín o de los comerciales de televisión cacasenos en donde el mal gusto de la producción únicamente puede ser comparable a lo mal vestida que anda la Ministra.
Encima que la pobrecita es una belleza bien exótica.
Los veremos irse y reciclarse mas rápido que inmediato y no me va a sorprender verlos un día de asesores en algún gobierno de ultra-izquierda, centro-derecha o afro-latino-caribeño-nipón.
Los políticos en el mundo suelen ser normalmente unas lacras -salvo honrosas excepciones contadas con los dedos de la mano del que mató a la esposa del Dr Kimble- en nuestro sufrido Perú, el Agente Smith de The Matrix los tomaría de la cabeza y certificaría, que efectivamente son un virus, para el cual deberíamos usar nuestra vacuna talla 43 en pleno derriere.
¿Jurá por Dios y estos santos evangelios, cumplir con las funciones de Ministro en la cartera que se le ha encomendado? ¿Cómo dice?... ¿Qué cuanto hay?...Mitad y media mitad para mi...
Andaaaaa!
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