Fugítivo para la ocasión
Por Hugo Del Portal
No recuerdo con exactitud, en qué película, Marcelo Mastroainni se levanta de la cama con un pijama a rayas convencional y el cabello desordenado, graciosamente despeinado.
Lo primero que debo señalar es que el más viejo de la Pandilla Crousillat, Don Pepé Kike, al parecer -amén de telenovelas mexicanas- gusta también del buen cine italiano.
A el y a sus captores de hoy, no se les ocurrió mejor idea que presentarnos al perseguido caballero bajo una obviamente montada escena de trabajo sicosocial, en pijama y bien despeinado ( para que luzca ante las cámaras, como un tío al que han despertado a las cuatro de la madrugada) y todo eso, como si no nos bastara el haberlo visto en video y con todo el cuajo que se maneja, primero recibiendo tremendo maletín con montañas de dólares de Montesinos y después haciéndose el enfermito para que el gobierno -vía el entonces Ministro de Justicia, Dr Aurelio Pastor y el actual Presidente, Dr Alan García- lo liberen (de la cárcel dorada en una clínica privada) indultándolo sin pensarlo dos veces, para que empiece con su lío particular, de puro interes personal, con los nuevos dueños de América Televisión (sean quienes sean) en otra de esas gastadas jugarretas cocinadas ante las presiones de una prensa bastante fenicia para andar peleando el colateral.
Que ya nos estamos aburriendo de que se use sin asco a cuanto desagradable saldo del fujimorismo que haya libre en el mercado de la opereta y la utilería chicha.
Que el ilustre ex-broadcaster haya estado paseando por el distrito de Miraflores sin que la Benemérita Guardia Civil le eche el guante (dicen que lo veían como ven en Norteamerica a Elvis Presley, a cada rato y por todas partes) y que aparezca en tan particular situación del país: de alza de productos de primera necesidad, de acallados escándalos de corrupción como el caso de Fernando Barrios, de patéticas sentencias del Poder Judicial que salvan a los roedores del caso petroaudios, de la eventual crísis interna del partido que nos malgobierna, del ego colosal de un Presidente a punto de reventar fisica y psicológicamente, no nos parece meramente casual y distinguimos una maloliente CORTINA DE HUMO.
Eso sí, para la próxima vez, por favor, un poco más natural, menos detalle inútil o sino cuéntenme una de piratas porque éste remake policial no se la cree nadie, ni siquiera mi sobrinita de tres años, que es todo candor y que debe ser el sueño de ciudadano que quiere el Poder siempre avieso, en busca de distraídos a quienes lavarles el cerebro para esquilmarlos.
-Joder, con los cambios de ritmo en la isla de edición, ayer fue la marinera del tío George, hoy es el valsesito del tío Pepé Kike, comuníquenme con el Doc en la Base Naval, para una consultita-
Nota: Al término de este comentario, nuestro Presidente, Dr Alan García, acaba de confirmarnos que se trata de una cortina de humo al declarar a los medios que no se trata de una cortina de humo.
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