lunes, 25 de enero de 2016

I AM BACK

Al final de "The color of Money" Eddie (Fast) Felson le dice, a Vincent (un Tom Cruise,  casi invencible en el juego del pool) : "si no te gano hoy, lo haré mañana, y sino mañana. lo haré el próximo vez y sabes por qué? por qué estoy seguro?  porque He vuelto!"
Nosotros no venimos a ganarle a tanto losser suelto, ni para escupir el estofado del negociado ajeno, ni para hacernos los heroicos,  y menos los tercios, o por personalismos que son cosa de fatuos.
La inspiración ¿han oído de ella? ha tocado nuestra puerta en forma de amigos, lecturas, familia, cine, necesidades vitales para quien quiera ser , por fin, y después de tanto joderse, un ser libre.
Estamos, como todos,  asqueados, pero tomamos a diario un baño de aceite de oliva tunecino primera presión y una pastilla de una especie de gravol  mental para la nausea sartreana.
Lo decimos : que cada quien haga uso de su libre albedrío mientras pueda y después que no queje por no tener cuidado con lo que desea, el universo suele ser ironicamente, cumplidor.
Nosotros -como decía San Francisco de Asís- deseamos poco y lo poco que deseamos lo deseamos poco, porque esto del mundo no nos envanece ni nos podría comprar al peso.
Creemos que la fama es la peste negra del siglo.
Que la política, se ha vuelto la génesis de la clase sinvergüenza.
Que los valores y la ética  han sido desintegrados por una murga de anomia que desprecia lo bello, lo culto, lo artístico, y que camina con una humanidad ciega deslizándose al borde del abismo de una época que llega a su pelotudo final para demostrar que tampoco resultan estos salvajismos de la sobre vivencia de los mas fuertes o los mas cínicos, que han acrecentado, hasta los problemas climáticos al extremo de que uno puede convertirse en una mutación genética de tan solo exponerse al sol.
Aquí estamos, con mucha broma y harta chanza,  para nuestros politicastros locales enceguecidos por la vanidad del ansía por ese rollo de papel higiénico coloreado que llaman banda presidencial o por el placer de reposar sus nachas en esa silla que llaman curul. Y todo eso viene con su sobrecito.
Eso se llama cambiar el alma por la quincena y la ideología por el confort miserable.
Aquí estamos,  para decirle mil veces,  no al imperialismo,  venga de donde venga.
Para hablar de cine, de Literatura, (la buena, de la mala que se ocupe Clara Elvira) de poesía, y del amor que es lo que deberíamos movernos a todos para poder trascender este estadio gusanesco.
Y nada pues,  say no more, y ya saben cuídense de los cantos de sirena del becerro de oro.
Recuerden: I am back. He vuelto!
Hugo del Portal