domingo, 8 de marzo de 2015

NUESTROS HERMANOS DEL SUR

Humala y 'El Comercio'
por César Hildebrandt
Que "El Comercio" intente dividir al gobierno frente al tema de Chile es algo que no debe sorprender a nadie. El viejo diario tiene al presidente del directorio de LAN en su entorno más íntimo y hace muchos años que sólo piensa en el dinero.
El problema para 'El Comercio' es que esta vez se pasó de la raya (no es una alusión a ninguno de sus editores por si acaso). Inventar que en Torre Tagle “existiría preocupación” por el uso político que el Ejecutivo pueda hacer de la situación es hablar como Garganta de Lata, el célebre personaje del rotísimo "Condorito".
Ha hecho bien Humala en enfrentarse a la maquinaria de "El Comercio". Ya era hora de que alguien con su investidura le dijera a ese grupo lo que piensa la mayoría de peruanos. Claro, ahora le lloverán periodicazos. Lo bueno del asunto es que la concentración de medios se notará más que nunca y que todos veremos lo que es un cargamontón estilo 'Clarín' bonarense.
Chile tiene un aliado firme en 'El Comercio'. Es como si el reloj de arena se invirtiera y Manuel Amunátegui, el chileno de Chillán que lo fundó en 1839, hubiese regresado en la expedición de algún Bulnes. En realidad, "El Comercio", aunque simpatiza con Chile, no tiene más bandera que el dinero. Su vocación es el cosmopolitismo sin himnos ni escudos ni memorias ni historia. Ni importa qué palabras pronuncie ni a qué plumíferos acuda para defenderse: el hecho es que en el momento delicado que vivimos armó un tinglado cuyo objetivo era mostrar al mundo un gobierno quebrado por las discrepancias.
Ojalá que ante esta situación la izquierda se pronuncie. Que sus califas de bolsillo no sigan despreciando el asunto de la dignidad nacional y la grosera y reiterada intromisión de Chile en asuntos de seguridad y soberanía. Y ojo que el "internacionalismo proletario" no funciona en Chuquicamata.
En esta revista criticamos con acritud a Ollanta Humala. Esta vez tenemos que reconocerle haber actuado en nombre del país. Y que "El Comercio", esa madame, no venga ahora a hacerse la víctima y a listar un recuento de agravios y amenazas. Ellos ha hecho ayer del periodismo un vil oficio.
Porque aun en la hipótesis de que Torre Tagle, infestado siempre por la diplomacia concesiva que tanto contribuyó a nuestras mutilaciones territoriales, se haya diferenciado en algún matiz de la posición del Ejecutivo el problema para "El Comercio" es que su primera plana saluda a la posición chilena como conciliatoria y, por lo tanto, aceptable.
¿Le parece a “El Comercio” conciliatorio burlarse del Perú? Porque no otra cosa que burla es decir, como dice la respuesta chilena, que el espionaje no se dio, que en caso de haberse dado no partió del gobierno de Bachelet (que apenas tiene algunos meses de existencia) y que están dispuestos a iniciar una “indagación” al respecto. Esa grosería a “El Comercio” le parece “conciliatoria”.
En todo caso, el canciller Gonzalo Gutiérrez fue claro y cortante ayer cuando, según la agencia oficial Andina, sostuvo que la voz del Perú es una sola y que es el presidente de la república el encargado de diseñar la política exterior y corresponde a Torre Tagle formularla y ejecutarla. Así de claro. El Arauco domado.
Hildebrandt en sus trece
Publicado el Viernes, 6 de Marzo del 2015
Hildebrandt en sus trece

De acuerdo con Humala en este caso y suscribiendo el artículo de Cesar Hildebrandt, El Comercio mas que pro chileno es pro billete y amante del rico colateral, aprovecha la concentración de miedos de acuerdo a sus intereses. Y a veces es tan repulsivo que no sirve para envolver pescado. En cuanto a Chile, mis antepasados los combatieron en todos los frentes, y yo no puedo ser la excepción, soy antichileno, anti Doctrina Portales, y pacifista por naturaleza.