DECANO INFAUSTO
por Hugh Player
Si colocamos en el buscador de Google las palabras Revista Fausto, la pesquiza ha de llevarnos a la venta especial de colección de un empastado de quince números de una publicación de origen chileno con ese nombre. Sabedores de la debilidad del Decano para con los vecinos del sur (desde su fundación en manos precisamente de un ciudadano de ese páis) podemos entender porque en lugar de generar un nombre propio y original, los creativos de El comercio optan por la facilidad de un plagio tan torpe como descarado. ¿Y qué hace la "nueva dirección" al respecto?. Nada.
El pecado no queda ahí, ya que el logotipo esta practicamente pantografiado de la antigua Librería Fausto (*) del centro comercial Los Duendes de la avenida Benavides en Miraflores. Local célebre por la presentación de importantes obras literarias y por haber generado las mejores campañas publicitarias de libros en los últimos tiempos, desde las obras de Luis Alberto Sanchez hasta las de Mario Vargas LLosa.
El dueño de este negocio fue Gerente en el Decano y también tenía a cargo un espacio de crítica de libros con el mismo nombre de su negocio.
Esto lo sabe muy bien el actual director de la Revista Fausto del diario El Comercio, el Sr Mario Ghibellini, que además era cliente del establecimiento del Sr Pedro Insausti Galletti cuando la librería de moda era visitada por todo el mundo.
Consultando al mismo propietario sobre este extraño hecho por el cual usan el nombre y el logo de su antiguo negocio, sin siquiera preguntarle, nos dijo que si bien Fausto era un nombre universal, estaba al tanto de las carencias neuronales del personal de ese diario y que con gentileza los autorizaba a usar los frutos de su trabajo intelectual. ya que desde que renunció al Decano había notado que el periódico perdía en cada edición parte de su herencia, mas aun cuando ponia un entusiasmo desmedido en anunciar negocios relacionados al comercio carnal.
El Comercio de estos tiempos modernos de empujones y despojos es ahora un negocio que bien podría compararse a los textileros tramposos de Gamarra que fabrican prendas pirateando a las mejores marcas mundiales de ropa hasta con la misma etiqueta. Deja mucho que desear que la "actual directiva" se comporte como pajaros fruteros apropiándose del trabajo ajeno.
Ellos estan a salvo en este tipo de actividad de copistas porque nadie quiere usar para nada el nombre de sus productos, tan venidos a menos.
La suerte del mediocre, le dicen.
(*) Libreria Fausto S.A. es una empresa fundada en 1975 debidamente inscrita en los Registros Públicos y en la Biblioteca Nacional de Lima. Suspendió temporalmente sus actividades comerciales estando aun vigente.
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