SABLE LASER

SENTENCIA PREVIA

por Obiwan Kenobi

Ayer este blog decidió guardar un prudente silencio de flemático observador.

Moscas hubo y en demasía. Igual decidimos dejarlas revolotear en su miel.

Y es que la sentencia del siglo (que nombre para rídiculo, joder) sirvió para que los protagonistas de Planeta Terror (¡los zombies nunca mueren!) reaparecieran ante tanto periodismo candelejón que le puso micro a todas las cacatúas y papagayos del fujimontesinismo. Hemos escuchado boludeces de toda laya. En pro y en contra, para ser justos, porque que los jueces cumplan con su deber haciendo su chamba, como cualquier laburante honrado, no quiere decir que hay que empezar a ponderar al barrendero porque barre, al periodista porque investiga (no es joda, hay algunos que no son lobistas de las petroleras) y al estudiante por hacer su tarea en casa.

Esa es la vida del juez, administrar justicia mediante la dación de sentencias. Que lo haga correctamente depende en gran parte de su formación ética y moral. Lo demás es puro blablablá. Mero bururú. Y de histórico no tiene un joraca.

Y revisando la prensa internacional nos encontramos que sólo los chilenos (que tuvieron vela en este entierro) se ocuparon ampliamente del tema porque nadie en la prensa mundial seria, empelotó la sentencia de un tipejo tan pintoresco y folclórico que fingió un correteo policial al socio (la ex-esposa dijo que eran pareja, quizás por eso lo ceteseseó (*) con 30 palos verdes) para deshacerse de los videos que lo comprometían hasta las cachas, fugó del país figiendo que iba a un foro mundial en Asia, renunció por fax dejando en Palacio como rehén al pez globo y compinche de la hijita y después tuvo la ostra, el coñazo, de presentarse de candidato para congresista en el Japón (en esa epoca decía que iba a ayudar al Perú canalizando la inversión nipona) con su verdadera ciudadanía. Porque el y sus cachorritos son mas ponjas que peruchos. Y tienen doble nacionalidad.

Nadie pues se ocupo en todo el orbe de semejante payaso. Para los españoles mas importante era el barco raptado por los piratas somalíes. Y para los argentos el fútbol de la Copa Libertadores. Ya que de afuera siempre nos miran como también ven a los chilenos porque somos gemelos cuando nos ponemos tan tercermundistas, tan huachafos, que nos emociona hasta los huesos que Kina gané un título mundial pegando combazos o que Sofi sea una estrella de la tabla pituquesa por excelencia, porque somos unos menesterosos que nunca ganamos nada y los vecinos, igual.

A Marcelo Ríos también lo recibieron y premiaron en La Moneda (hablando de una inexistente nueva generación de tenistas mapochos) porque los cholos y los rotos son igual de provincianos. Nos parecemos tanto que al final nos terminamos odiando porque siempre se teme o se detesta lo que se lleva por dentro.

Este blog cree que si hubiese verdadera equidad a Fujimori habría que matarlo (mentalmente nada mas) veinte y nueve veces porque es obvio que las víctimas de La Cantuta y Barrios Altos son la representación emblemática de las miles de perdidas de una guerra que el debió conducir con la ley (que le asistía, por Dios) en la mano y no convertirse en un complice mas, tratando de tapar el sol con la sombra del encubrimiento, al premiar e indultar a un grupo de psicópatas a los que temía, porque conocía de sus talentos en el arte de hacer pomada al projimo.

Culpables con el, son la vieja derecha que alentó esta guerra fraticida y la sociedad civil que callaba en todos los idiomas por miedo o por conveniencia. Y peores aquellos que recibieron un mango de una dictadura cleptomaniaca a todas luces.

Sin embargo el daño mayor flota aún en el ambiente cuando uno puede confirmar que las viejas prácticas de la cultura combi que ha partido en dos la nación peruana

(como un cuchillo caliente a un barril de manteca) siguen en curso porque subyacen en la ideosincracia de un pueblo desalmado y bastante ignorante, orgulloso de sus falencias, que por el bolsillo puede llegar publicamente a justificar el crimen y a negar su propia esencia como ser humano.

El daño del fujimontesinismo llegó a todos los estamentos de una sociedad poco sólida por cierto y se incrustó en los genes de sus habitantes y su gente.

Vemos que todavía cuesta trabajo desalojar al impostor que ha marcado sus límites en la conciencia de esta republiqueta pisquera. Un blog bobo publicó una lista de de periodistas y aficionados que -según ellos- colaboraron con el castigo al caco japonés tornándose en gestores del cambio y de la nueva efemérides legal.

(Alabate coles que el autobombo esta en oferta a falta de reconocimiento real)

Y así, mientras sigamos en la opción de rematar los ideales por la falsa seguridad de la quincena nos quedan muy pocas esperanzas de reconstruir la vieja historia peruana que hablaba de posibles grandezas. De una majestuosidad aun no vista.

Fujimori es una circunstancia, nada más. El tiempo ya lo había dejado atrás.

Abramos los ojos y veamos hacia adelante para ver que nos espera y confiemos en que de una vez por todas hagamos las cosas como se debe: en silencio, en el anonimato y sin esperar pueriles y vanos agradecimientos.

(*) Cetesesear: Pagar la CTS (compensación por tiempo de servicios)

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