miércoles, 20 de agosto de 2008

SABLE LASER




La evolución hacia la nada


por Obiwan Kenobi




Suponemos que algo le pasa. No le estarán dando su diario cerelac o sus pastillitas para la -cada vez mas obvia- bipolaridad. No hay como explicar que sucede con el gobierno en estos tiempos friolentos. ¿Será el frío?. Imposible con tanta grasa.

¿Será el colesterol? . A lo mejor. Pero sospecho que el gordo no está subiendo al níspero de un mandato claro. Y anda con los ojos inyectados en deseos frustrados, en posesiones interrumpidas, en encuentros prometidos, en insatisfacción.

Malos consejeros, pésimos asesores y voluntarismos suicidas. Leyes inoportunas. ¿Intereses de por medio?. Bola en la buchaca. Por ahí marcha el asunto.

Porque no es entendible que una persona que antes decía que la Magdalena no estaba para tafetanes y que alguna vez declaró: que si uno le metía látigo a los trabajadores no le pasaba nada pero que Dios lo librará de chocar con un banquero, este ahora tan entregado a unos tagarotes aviesos y vistiendo a la misma Magdalena hasta con zapatitos de tafetán que no duran absolutamente nada.

Tobi era un bailadorcito payasón pero jamas hubiera armado un tono antes de conmemorarse la muerte de mas de 500 peruanos. Tobi era unjugador con gusto por las fichas pero tampoco se adornaba con la armadura oxidada de la derecha nativa.

Tobi sabía que el partido era importante, que había que cumplirla con tanto compañero llorón pero no se lanceaba a extremos de producir una polémica con cada nombramiento, un intercambio de revelaciones por cada funcionario. Y si bien en su primer gobierno hubo una hiper inflación de la patada también es verdad que nunca quizo salir de la criticada casilla de gobernante populista.

Este nuevo ser es un reaccionario de cuarta, un hombre que tras cada decreto-ley hace temblar a los puentes del país (que terminan tomados por pobladores recontra alterados que hasta cargan lanzas y flechas), un déspota que maltrata a los periodistas que se atreven a preguntar algo incómodo y que trata con guante de seda a los asesinos del fuji-montesinismo con presidios dorados.

Tobi esta dejando de ser el tío panzoncito y hasta simpaticón para cubrir los gastos del futuro metiéndose en una serie de tratos raros con los aviesos mercantilistas que pueblan las listas del Club Nacional y del Club del Golf.

Tobi esta dejando de ser el mismo para convertirse en Catrasca el gordo catástrofe, sin darse cuenta que semejante jugada se esta llevando su vano paso por la historia hacia la decapitación de la democracia representada en su gestión.

Ya hemos perdido para siempre al Tobi local, aquel cínico medio sinvergüenza al cual podíamos ver con paciencia y comprensión. En su lugar hay un Catrasca que con cada decisión que toma simplemente la termina de jorobar, un ser roñoso, problematico y malcriado, en suma, un hombre al que el pueblo esta empezando a detestar con mas vehemencia de lo normal. ¿Valió la pena? .

Creo que la respuesta no le va a gustar. Me parece que cada día esta mas lejos y mas solo y que aquellos que lo rodean solo buscan llevarse los últimos estertores de un gobierno que en definitiva se nos va como otro tren de las oportunidades perdidas.

Lástima Tobi, que te decidiste por ser Catrasca. No sabíamos que tanto te querías suicidar y tan solo, por unos dolares mas. Todo un proceso de involución.


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