Congreso aprobó delegación de facultades al Ejecutivo por TLC
La solicitud fue aprobada con 54 votos a favor, 38 en contra y ninguna abstención. El premier Del Castillo estuvo presente en el Hemiciclo y agradeció a sus colegas por respaldar este pedido.
El Pleno del Congreso de la República aprobó esta noche la solicitud del Ejecutivo para legislar por 180 días con la finalidad de implementar el Tratado de Libre Comercio (TLC) suscrito con los Estados Unidos.
Luego de un tenso debate, la representación nacional aprobó con 54 votos a favor, 38 en contra y ninguna abstención el pedido del Gobierno Central para adecuar las normas nacionales al tratado.
Asimismo, se conformó una comisión mixta conformada por cinco parlamentarios quienes apoyarán al comité de ministros que tendrán a su cargo la implementación del acuerdo comercial.
El pedido de la oposición, de solicitar una segunda votación, no prosperó. Al someterse a voto esta cuestión, 52 legisladores la rechazaron mientras que 33 la respaldaron.
El presidente del Consejo de Ministros, Jorge del Castillo, estuvo presente durante la sesión y ocupó su curul de congresista. Al culminar la votación, agradeció a sus colegas por respaldar la solicitud del Ejecutivo en el mismo día que el TLC fue promulgado por el presidente de Estados Unidos, George W. Bush.
Presidente Bush promulgó TLC con Perú
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, firmó hoy la ley que promulga el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Perú, en una ceremonia a la que asistió su homólogo peruano Alan García.
El acto tuvo lugar en el edificio Eisenhower, contiguo a la Casa Blanca, después de una reunión entre ambos gobernantes, en la que, además del tema comercial, trataron el tema de la inmigración y la situación de América Latina en general.
Tras el acto, García mostró su satisfacción por la firma del pacto, que -en su opinión- ayudará a los más desfavorecidos de su país a salir de la pobreza.
El acto tuvo lugar en el edificio Eisenhower, contiguo a la Casa Blanca, después de una reunión entre ambos gobernantes, en la que, además del tema comercial, trataron el tema de la inmigración y la situación de América Latina en general.
Tras el acto, García mostró su satisfacción por la firma del pacto, que -en su opinión- ayudará a los más desfavorecidos de su país a salir de la pobreza.
"Es un gran día para Perú, y un mal día para el autoritarismo y para los que se oponen a la democracia y al libre comercio", dijo el mandatario peruano.
García calificó a Bush de "aliado verdadero y un amigo del pueblo peruano", y pidió públicamente al Congreso estadounidense la aprobación de los otros dos acuerdos pendientes con Latinoamérica, el de Colombia y el de Panamá.
Bush, por su parte, consideró que el TLC "es bueno para el pueblo de Perú, pues garantiza el acceso al mayor mercado del mundo"
Este convenio muestra al pueblo estadounidense que "el Congreso (de mayoría demócrata) y la administración pueden colaborar" en temas de comercio, apuntó.
La firma de Bush puso fin a un difícil proceso de negociaciones políticas con el Congreso de Estados Unidos, después de que los demócratas arrebataran la mayoría a los republicanos en noviembre de 2006.
El cambio de poder empeoró un ambiente ya hostil al comercio en la Legislatura, pero el Congreso finalmente dio su visto bueno al pacto después de que los Ejecutivos de EE.UU. y de Perú aceptaran fortalecer las protecciones laborales y al medio ambiente en el acuerdo.
El convenio, firmado por ambos países el 12 de abril de 2006, prevé la reducción inmediata de los aranceles mutuos, establece normas de protección a la propiedad intelectual y la inversión, y un mecanismo para la resolución de disputas comerciales.
El único obstáculo que resta para su entrada en vigor es la adecuación por parte de Perú de su normativa a las disposiciones contenidas en el texto.
La firma del mandatario estadounidense era el último paso necesario para la entrada en vigencia del tratado, que ahora deberá comenzar el camino hacia su pleno funcionamiento.
El intercambio comercial entre Perú y Estados Unidos alcanzó 8.800 millones de dólares en 2006 según cifras oficiales estadounidenses.
García calificó a Bush de "aliado verdadero y un amigo del pueblo peruano", y pidió públicamente al Congreso estadounidense la aprobación de los otros dos acuerdos pendientes con Latinoamérica, el de Colombia y el de Panamá.
Bush, por su parte, consideró que el TLC "es bueno para el pueblo de Perú, pues garantiza el acceso al mayor mercado del mundo"
Este convenio muestra al pueblo estadounidense que "el Congreso (de mayoría demócrata) y la administración pueden colaborar" en temas de comercio, apuntó.
La firma de Bush puso fin a un difícil proceso de negociaciones políticas con el Congreso de Estados Unidos, después de que los demócratas arrebataran la mayoría a los republicanos en noviembre de 2006.
El cambio de poder empeoró un ambiente ya hostil al comercio en la Legislatura, pero el Congreso finalmente dio su visto bueno al pacto después de que los Ejecutivos de EE.UU. y de Perú aceptaran fortalecer las protecciones laborales y al medio ambiente en el acuerdo.
El convenio, firmado por ambos países el 12 de abril de 2006, prevé la reducción inmediata de los aranceles mutuos, establece normas de protección a la propiedad intelectual y la inversión, y un mecanismo para la resolución de disputas comerciales.
El único obstáculo que resta para su entrada en vigor es la adecuación por parte de Perú de su normativa a las disposiciones contenidas en el texto.
La firma del mandatario estadounidense era el último paso necesario para la entrada en vigencia del tratado, que ahora deberá comenzar el camino hacia su pleno funcionamiento.
El intercambio comercial entre Perú y Estados Unidos alcanzó 8.800 millones de dólares en 2006 según cifras oficiales estadounidenses.
No haremos mas comentarios sobre este tema, creemos que el mal ya esta hecho y esperamos -de todo corazón- equivocarnos hasta el tuétano en nuestra apreciación. Sin embargo hay que señalar que esta mentalidad entreguista y de sometimiento no nos representa en lo que somos como nación y como seres humanos. Tampoco creemos que el dipsómano de Bush sea amigo nuestro y sabemos que ellos son aliados solamente de sus pueriles intereses. Agárrense de lo que sea porque nos van a sacar el país sin anestesia. Y algunos se harán mas ricos en el intermedio.
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